
Una Plegaria Católica para Encomendar a tus Hijos a Dios
Como padres, nuestro mayor deseo es ver a nuestros hijos crecer en un mundo lleno de paz y bienestar, protegidos de todo mal y rodeados de bendiciones por los hijos que tanto amamos. En la fe católica, la oración es un puente directo hacia Dios, una forma de pedir protección, ayuda, paz y bienestar para aquellos que son nuestro mayor tesoro. Hoy te comparto una oración para pedir por los hijos, escrita con el corazón, para que la hagas tuya y la eleves con fe.
Oración por los hijos para pedir por su protección y bendición:
“Amado Dios, Padre celestial, hoy pongo en tus manos a mis hijos, fruto de tu amor y mi esperanza. Te pido que los cubras con tu manto santo, que los guardes de todo peligro y les des protección en cada paso que den. Derrama sobre ellos tus bendiciones por los hijos, llénalos de salud, sabiduría y alegría.
Señor, guía sus caminos con tu luz, aléjalos de las tentaciones y concédeles paz y bienestar en sus corazones. Que crezcan en tu gracia, con un espíritu fuerte y un alma pura. Virgen María, Madre tierna, cúbrelos con tu santo rosario y preséntalos ante tu Hijo.
Por tus hijos, Señor, te suplico: hazlos instrumentos de tu amor y protégelos hoy y siempre En el nombre de Jesús, amén.”
Esta oración, rezada con fe, es un regalo de bendiciones y protección para tus hijos y una forma de confiar en que Dios siempre escucha. Reza por ellos cada día y verás cómo su amor los sostiene.
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Oración de los padres para pedir por los hijos su bienestar y seguridad:
Padre eterno y lleno de misericordia, hoy me postro ante Ti como madre [o padre] para poner en Tus manos a mis hijos, mi mayor tesoro. Te pido que los cubras con Tu santo manto de protección, que los guíes por caminos de luz y los libres de todo peligro, físico o espiritual. Derrama sobre ellos Tus bendiciones por los hijos, Señor, para que crezcan en salud, sabiduría y amor.
Virgen María, Madre y Reina, tú que conoces el corazón de una madre, intercede por mis pequeños [o jóvenes], envuélvelos en Tu paz y llévalos siempre al Corazón de Tu Hijo. Que encuentren ayuda en la adversidad, paz en la tormenta y bienestar en su alma. Te ruego, Señor, que cada paso que den sea bajo Tu mirada, y que mi fe en Ti los sostenga siempre. Amén.
Esta oración de los padres por los hijos no solo es un ruego, sino una entrega confiada a Aquel que todo lo puede. Rézala con el corazón abierto y verás cómo la presencia divina abraza a tus hijos cada día. ¿La has probado? Comparte tu experiencia o adáptala con tus palabras; lo importante es que sea un puente de amor entre tú, tus hijos y Dios.
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